MADRES ADOLESCENTES

Hola muy buenos días:

                                  En el tema de hoy comenzaremos a hablar de los problemas en los adolescentes.

¿Es la adolescencia la edad óptima para ser madres?

OBJETIVO: Reconocer las actitudes positivas de una madre que ha alcanzado la madurez y las consecuencias negativas que tiene la maternidad en una adolescente.

Hay momentos en la vida que son propicios para jugar, para estudiar, para trabajar, para enamorarse o para ser padres.

La edad cronológica marca el tipo de habilidades físicas, mentales y emocionales para ejercer una tarea. Cuando el cuerpo, la mente y el espíritu se encuentran en plenitud, en la edad óptima para que la mujer colabore con el milagro de la maternidad.

Es un hecho biológico que la mujer está físicamente preparada para ser madre al rededor de los once años, edad en que la niña pasa a ser mujer, al tener su primera menstruación.

Sin embargo, sabemos que emocionalmente no esta preparada para traer un hijo al mundo, ni para ejercer con responsabilidad las funciones que implica su formación.

Antiguamente era común que las mujeres contrajeran matrimonio a muy corta edad, ya que la cultura y las costumbres provocaban que la mujer madurara muy joven.

Hoy los tiempos han cambiado y aunque la edad biológica para reproducirse sigue siendo más o menos la misma, la mujer actual no está dispuesta a ser madre a muy corta edad, ya que tiene la inquietud de estudiar y prepararse para ser autosuficiente y después casarse y tener hijos.

Debemos tener presente que no es madre quien traer físicamente un hijo al mundo, sino aquélla que lo educa y lo ama. Precisamente por eso, se necesita que la mujer que va a ser madre reúna todos los requisitos que garanticen la formación integral del niño.

Por ello, es ideal que la maternidad se de dentro del marco de un matrimonio bien constituido, donde los padres se amen y sean capaces de formar una familia estable y feliz.

El hogar ideal para traer un hijo al mundo es aquél en donde se comparte la responsabilidad de amarlo, educarlo y guiarlo, compartiendo tanto los buenos momentos como las etapas difíciles.

La mujer, para realizarse como madre, debe primero haber satisfecho sus propias necesidades e inquietudes y conocerse a si misma para saber cuáles son sus fuerzas y cuales sus debilidades.

La maternidad no debe ser la consecuencia de un acto irresponsable, ya que una vez concebido el bebé no se puede dar marcha atrás.

Consecuencias emocionales de un embarazo durante la adolescencia.

- La experiencias sexuales tempranas generan una pobre autoestima en los adolescentes.

- Cuando las adolescentes son madres solteras, es probable que con frecuencia tengan sentimientos de culpa y sufran además la decepción de sentirse abandonadas por el padre de su hijo, lo cual traerá como consecuencia que tendrán que educar a ese bebé por sí solas.

- En el caso en que la madre decida quedarse con el hijo, demostrando así su responsabilidad y madurez, es posible que en ocasiones sienta agresividad hacia ese hijo, ya que lo percibe como un impedimento para lograr su metas.

- Hay otras ocasiones en que darlo en adopción parece ser la única opción, y cuando ésta se lleva a cabo sin la preparación psicológica adecuada, es probable que la madre tenga sentimientos de culpa.

El hijo de una madre adolescente frecuentemente crece sin la presencia de su padre, lo cual tiene la desventaja de no contar con una figura masculina que lo ame y, además, con la que posteriormente pueda identificarse.

Está comprobado que ambos padres son necesarios para el buen desarrollo de la personalidad de los hijos. Para el varón es fundamental convivir con una figura masculina a quien pueda imitar y con una figura femenina por medio de la cual él pueda aprender a relacionarse con otras mujeres. Igualmente sucede con la niña que deberá identificarse con la madre y aprender a relacionarse con varones por medio de la convivencia con el padre.

En caso de que no sea posible que ambos padres eduquen al hijo, deberá buscarse otra persona que reemplace al padre faltante, como pueden ser los abuelos, los tíos o los hermanos.

Cuando uno de los padres está ausente, el otro tendrá que duplicar esfuerzos para suplir esa carencia.

Repercusiones sociales de la maternidad en adolescentes.

Se ha comprobado que el sexo entre adolescentes, especialmente antes de los 15 años, es dañino para la salud física y psicológica.

Existe una fuerte relación entre las experiencias sexuales tempranas y el consumo de alcohol y drogas, se sabe que esta correlación induce a delitos menores y a fracasos escolares, con su consecuente repercusión social.

Los medios de comunicación han generado en la juventud actual una sobrevaloración de todo lo relacionado con la sexualidad, separandolo del amor y haciendo a un lado las repercusiones que tiene cuando se ejerce sin responsabilidad.

Actitud de los padres ante la adolescente soltera embarazada.

Al conocer el embarazo de la hija, es natural que la primera reacción de los padres sea de enojo y que se sientan decepcionados.

Es frecuente que los padres de la hija deseen que ésta se case para esconder su condición; y que, en cambio, los padres del muchacho se rehúsen a ello.

Tenemos que pensar que el error ha sido de ambos y que la responsabilidad de aceptar las consecuencias, también lo es.

A veces parece que el matrimonio es la mejor solución cuando una adolescente se embaraza; sin embargo, solo sera adecuado, cuando la pareja este convencida de que desea casarse y tenga cierto grado de madurez y de solvencia económica.

Aunque sea difícil, nunca debe rechazarse a la hija, sino por lo contrario, mostrarse comprensivos y acogerla con amor. Es preciso decirle que no están de acuerdo con su conducta, pero mostrar su confianza en que esta situación no se repetirá, y que a pesar de todo, ellos la aman.

Los padres deben comprender que la hija esta pasando por momentos difíciles y que solo con comprensión podrá superarlos.

Los padres están obligados a fomentar la esperanza en sus hijos para que estos sepan que tienen todavía un largo camino por recorrer y que su maternidad prematura no será un obstáculos para que ellos puedan ser felices, si enmiendan su vida.

  

¿DE QUÉ ES CAPAZ UNA MUJER ENAMORADA?

De no enajenar,

-no pedir.

De no condicionar,

-no aprisionar.

De respetar,

-no limitar.

De abrir las manos,

-no esperar.

De controlar sus impulsos,

-no presionar.

De abrir los brazos

y...

dejar volar.

Victoria Eugenia Pérez de León

Ningún familiar, esposo, esposa, hijo, hija,

padre, madre, me pertenecen. Los acepto

tal como son y no intento cambiarlos.

Estuvieron con ustedes:

                                      Mary Tere y Karla