CUANDO LOS ABUELOS VIVEN EN LA MISMA CASA

15/DICIEMBRE/2017

Hola buen día les saluda Mary Tere de Vargas con el tema:

"CUANDO LOS ABUELOS VIVEN EN LA MISMA CASA"

    En la actualidad ya no es tan común encontrar a los abuelos viviendo en la misma casa que sus hijos, como era costumbre hasta hace unos años, cuando a los ancianos se les daba un lugar preponderante en la vida familiar. Sin embargo, hay una serie de circunstancias como pueden ser la viudez, una enfermedad o la falta de recursos económicos, que orillan a los abuelos a vivir con los hijos casados. Esta convivencia de tres generaciones en un hogar, genera una serie de situaciones que pueden causar gran tensión en la familia.

    

El objetivo es destacar la importancia que tienen los abuelos en la relación  familiar y aprender a manejar las tensiones que tarde o temprano se generan cuando más de dos generaciones viven bajo el mismo techo.

      Volver a convivir con los propios hijos y además con los hijos políticos y los nietos, constituye un reto para todos.

      Recordemos que los abuelos vivieron tiempos en que eran autónomos, en que eran los líderes, los generadores de recursos económicos, que contaban con la plenitud de sus facultades físicas y mentales y además eran capaces de ser independientes.

      

Cuando tienen que depender del hijo o de la nuera para satisfacer sus más elementales necesidades como es el comer o el ser aseado y están sujetos a la voluntad de quien en alguna ocasión ellos cuidaron y alimentaron, se sienten desvalidos; y si además le agregamos la tensión propia de la convivencia, encontraremos que el anciano se siente sumamente infeliz al saberse dependiente y percatarse de que en ocasiones estorba.

        Por ello es muy importante que la familia permita que el abuelo o abuela satisfaga sus propias necesidades al máximo de sus posibilidades; y si además se le pide que contribuya de alguna manera en el manejo del hogar se le pide su opinión con frecuencia, se sentirá apreciado e importante.

        Este diario convivir  de tres generaciones da como resultado una serie de relaciones interpersonales que a veces generan alegría, pero muchas otras impaciencia y surgen problemas debido a una lucha de autoridades.

        Es comprensible que el anciano no esté preparado para perder la autoridad que alguna vez tuvo y que se le dificulte recibir instrucciones de quien por mucho tiempo lo obedeció.

       

Por otro lado, los hijos en este período se encuentran en plenitud y están acostumbrados a ser la máxima autoridad en el hogar y por ello es también difícil que acepten que sea el abuelo quien regañe o consienta al nieto, ya que sienten que se les está restando autoridad.

       A veces surgen problemas cuando el abuelo o la abuela entabla contra el yerno o la nuera una lucha sorda, con el único fin de mantener el primer lugar en la atención y cariño del hijo o de la hija.

      Cuando esto sucede, los abuelos tienen que pensar en aquello que hace feliz al hijo o la hija y tratar de evitar con sus celos y murmuraciones que surjan problemas entre la pareja.

      Querer a nuestros hijos significa aceptar de buen grado a la pareja que ellos escogieron y que nuestra experiencia y benevolencia nos haga ser tolerantes e inclusive amorosos.

       Hablar, escuchar, llegar a acuerdos, es siempre la mejor forma de entendimiento y la única para no llegar a situaciones extremas que van creando barreras de resentimiento entre los integrantes de la familia.

     

Esta constante convivencia requiere, como ninguna otra de la prudencia por parte de todos. Sin embargo, recordemos que quien está en plenitud de sus facultades físicas, mentales y emocionales es quien más obligación tiene de manejar las relaciones en forma constructiva.

      Tengamos presente que el respeto que mostramos hacia nuestros padres ancianos, marcará la pauta para el trato que nos darán los nietos. No olvidemos que hoy somos padres, pero algún día seremos esos abuelos necesitados de comprensión y ayuda. Cuando los nietos observan cómo los padres cuidan y se ocupan cariñosa y pacientemente2 del bienestar de los abuelos, reciben una lección de vida que difícilmente podrán olvidar.

     Podríamos preguntarnos: ¿Cuál es el papel de los abuelos en la familia? ¿ Qué pueden aportar los abuelos a sus hijos casados o a sus nietos? ¿ En que consiste la misión de ser abuelos? ¿ Cambia esta misión cuando el abuelo tiene que vivir con los hijos casados y con los nietos?

     La misión de los abuelos no debe limitarse solamente a "estar presentes". Si bien es cierto que ésta es una etapa en la que ya no existen las mismas obligaciones hacia los hijos y con los nietos no hay una responsabilidad directa, "estar" como un mueble o una cosa, desvirtúa el papel importantísimo que los abuelos representan para la vida familiar.

 

     La diferencia de edad entre abuelos, hijos y nietos, nunca debe de ser un impedimento para vivir en armonía. Hay ciertas pautas de conducta que facilitan esta convivencia:

     - Querer al otro tal como es y permitirle ser él mismo, con sus aficiones, gustos, mentalidad, etc.

     - Aprender a fijarnos en las cualidades y dejar de quejarnos de sus defectos.

     - Aceptar con madurez el papel que a cada cual le corresponde en las diferentes épocas de la vida.

     - Distinguir entre ser amorosos y permitir conductas negativas que dañan a la persona.

    Los abuelos deben tener la capacidad para saber cuándo su presencia y sus consejos son bienvenidos y cuándo es prudente permanecer callados, dejando que cumpla cada uno con el papel que le corresponde.

    A las generaciones modernas a veces se les olvida que son precisamente los abuelos los encargados de transmitir las tradiciones familiares y os recuerdos; y que los abuelos son quienes tienen la importante tarea de inculcar aquellos valores transcendentes que constituyen "la memoria" de la familia.

    La sola presencia de los abuelos (ya sea que vivan en nuestra casa o que vayamos a visitarlos) nos hace cobrar conciencia de nuestras raíces y nos enlaza con nuestro pasado.

 DICCIONARIO

CABAL: Preciso, exacto.

FAMILIA NUCLEAR: La formada solamente por los padres y los hijos.

PREPONDERANTE: Que tiene más importancia.

SOLIDARIO: Persona que adquiere un compromiso con relación a otra.

Se impecable con tus palabras (continuación)

 

Durante años, las palabras de los demás nos han transmitido chismes y nos han lanzado hechizos, pero lo mismo ha hecho la manera en que utilizamos las palabras con nosotros mismos.

Nos hablamos constantemente, y la mayor parte del tiempo decimos cosas como: <<Estoy gordo. Soy feo. Me hago viejo. Me estoy quedando calvo. Soy estúpido, nunca entiendo nada. Nunca seré lo suficientemente bueno. Nunca seré perfecto>>. ¿Ves de qué modo utilizamos las palabras contra nosotros mismos? Es necesario que empecemos a comprender lo que son las palabras y lo que hacen. Si entiendes el Primer Acuerdo (se impecable con tus palabras), verás cuántos cambios ocurren en tu vida. En primer lugar cambios en tu manera de tratarte y en tu forma de tratar a otras personas, especialmente aquellas  a  las que mas quieres.

Piensa en las innumerables veces que has que has explicado chismes sobre el ser que más amas para conseguir que otras personas apoyasen tu punto de vista. ¿Cuántas veces has captado la atención de otras personas y has esparcido veneno sobre un ser amado para hacer que tu opinión pareciese correcta? Tu opinión no es más que tu punto de vista, y no tiene por qué ser necesariamente verdad. Tu opinión proviene de tus creencias, de tu ego y de tu propio sueño. Creamos todo ese veneno y lo esparcimos entre otras personas sólo para sentir que nuestro punto de vista es correcto.

Si adoptamos el Primer Acuerdo y somos impecables con  nuestras palabras, cualquier veneno emocional acabará por desaparecer de nuestra mente y dejaremos de transmitirlo en nuestras relaciones personales, incluso con nuestro perro o nuestro gato.....

Del libro los cuatro acuerdos. (Primer Acuerdo, "Sé impecable con tus palabras")

Se despide de ustedes Mary Tere de Vargas dejándoles un grato saludo y deseando tengan excelente fin de semana.

Continúen siendo impecables con sus palabras...