ABORTO Y ADOPCIÓN

Hola muy buenos días:

                                       Hoy vamos a hablar sobre:

 Aborto y Adopción.

Hay circunstancias en las que una decisión puede marcar el resto de nuestra existencia, como por ejemplo decidir con quién casarnos o bien cómo enfrentar un embarazo no deseado.

OBJETIVO:

Reflexionar sobre la problemática de los embarazos no deseados y tomar conciencia de las actitudes y acciones que beneficien tanto a la madre, como al hijo. Comprender el impacto y trascendencia del aborto. Pensar en la adopción, como una opción.

La civilización actual está envuelta en un hedonismo tal, que hace que el hombre o la mujer eviten cualquier situación que los aleje de una vida placentera. Este hedonismo ha propiciado que muchas veces se vea el aborto como la solución a un embarazo no deseado.

Los temas respecto al aborto y a los embarazos no deseados son sin duda temas controversiales, no sólo en México, sino en el mundo entero, generando serios problemas y enfrentamientos.

Hoy vamos a reflexionar sobre las actitudes y las acciones que se pueden tomar ante un embarazo no deseado, recordando que el aborto provocado siempre constituye un homicidio, ya que atenta contra la vida de un ser humano.

Es pertinente aclarar que una vez que ha nacido el bebé, son sus padres los que tienen la responsabilidad de decidir el futuro de su hijo y que, en caso de que sean menores de edad, son los abuelos del bebé los que adquieren legalmente esta responsabilidad.

Hay varias alternativas que se pueden tomar ante un embarazo no deseado:

• Cumplir con la misión de ser padres y educar al niño con amor y responsabilidad

Es obvio decir que esta opción es la óptima para el bebé, si la pareja esta preparada emocional y económicamente para formar una familia feliz.

• La madre se hace responsable y procura el apoyo de los abuelos

Con frecuencia es la mujer quien tiene que responsabilizarse del hijo, pero ello será más fácil cuando cuente con el apoyo de sus propios padres, o al menos, con el de uno de ellos. Así el niño contará con una familia en la cual crecer y desarrollarse con amor.

• Acudir a las casas hogar que existen en diferentes estados de la República

Cuando se carece de cualquier tipo de apoyo y la joven no desea quedarse con el bebé, existen otra opción que puede ayudar a la madre a llevar a término su embarazo. En estas instituciones se les proporciona servicio médico, asesoría psicológica y educativa, se les brinda apoyo emocional y se les enseña diversos oficios que posteriormente le servirán para ganarse la vida. Además, se les enseña cómo se cuida y se alimenta un bebé, se les da la asesoría legal que se requiere para dar al bebé en adopción, aunque es frecuente encontrar que una vez que la madre ha vivido nueve meses en un ambiente de paz y amor, esté dispuesta a quedarse con su bebé.

ABORTO

La defensa de la vida ha sido considerada como un pilar para el desarrollo de las familias y de las naciones. Desgraciadamente en los últimos tiempos han surgido corrientes que lesionan este principio fundamental con razonamientos que rechazan, no sólo la Doctrina del Papa, si no que van contra la moral y la propia naturaleza del ser humano.

Tanto el hombre como la mujer responsables de un embarazo, independientemente de su edad o circunstancias, son corresponsables de la vida de esa criatura, cuyo destino natural es venir a este mundo.

Algunos padres confunden esta responsabilidad con un poder equivocado, al considerarse dueños de la vida del bebé, y le niegan así la posibilidad de nacer.

Con frecuencia las parejas, por ignorancia o miedo, toman la decisión de privar de la vida a un ser completamente indefenso.

Entre las causas más comunes que se argumentan para abortar, encontramos:

• El derecho de la madre a tomar decisiones sobre su propio cuerpo

Quienes se apoyan en este argumento, olvidan que el bebé en gestación no es una prolongación ni un órgano más del cuerpo de la madre, sino que constituye una nueva vida con dignidad y derechos propios y que igual que su madre, tiene derecho a exigir que se respete su vida.

• Un mundo sobrepoblado y deshumanizado

Quienes piensan en esta forma, justifican su decisión de abortar diciendo que pronto no va a haber suficiente espacio y alimento para todos y que el bebé sólo va a venir a sufrir a este mundo. Esta opción no es válida porque el mundo aun tiene muchos espacios y recursos para que el hombre siga subsistiendo y se han olvidado de que todas las tribulaciones por las que atravesamos en nuestra vida son superables, ya que Dios es un padre amoroso que jamás nos deja sin su protección y auxilio.

• Cuando el bebé es producto de una violación 

Quienes justifican el aborto por que la mujer que ha sido violada es victima de un trauma físico, mental y emocional, olvidan que, al abortar, el trauma se intensifica debido a las repercusiones psicológicas que generalmente acompañan a la mujer después de este homicidio.

• Cuando hay probabilidades de que el bebé nazca con algún problema congénito

Quienes piensan que un bebé con problemas congénitos hará intolerante su propia vida y la de quienes lo rodean, olvidan que quienes sufren alguna discapacidad tienen el mismo derecho a la vida y a ser tratados con la misma dignidad que el resto de los seres humanos. Aceptar que se pueda decir quién debe nacer y quién no, podría dar resultado que en un futuro se abortara a los niños de determinada raza, color de piel, medidas de cerebro, etc.

• Cuando peligra la vida de la madre

Este argumento y es obsoleto por los avances de la ciencia médica que hacen casi imposible que se tenga que elegir entre la vida de la madre y del hijo.

ADOPCIÓN

Hay circunstancias en las que es muy difícil quedarse con el bebé, bien sea porque no se cuenta con la madurez que se requiere para ser madre y padre, o porque no exista ningún apoyo familiar que facilite educar al hijo, o que este sea producto de alguna violación o simplemente porque los padres no desean conservarlo. En estos casos la adopción es una alternativa que probablemente garantizará la felicidad del niño, ya que generalmente los padres que buscan adoptar un bebé, son seres humanos con grandes deseos de amar y de proteger, realizando así sus más íntimas aspiraciones.

Dar un hijo en adopción es muchas veces un acto de amor, cuando se sabe que el bebé estará mejor en otro hogar que pueda brindarle lo que nosotros no podemos.

En caso de querer dar al bebé en adopción, es indispensable saber que hay dos tipos de adopción:

la directa y la institucional.

La adopción directa no es legal y consiste en ceder al hijo a parientes o conocidos.

La adopción institucional se da a través de instituciones encargadas de este proceso para que se lleve acabo en forma legal y además con la seguridad de que se escogerá a la pareja adecuada para el bebé.

En todas las ciudades hay organizaciones gubernamentales o particulares que se encargan de que las adopciones se lleven a cabo en forma privada y legal.

Para que la adopción culmine con un proceso exitoso, se deben observar las siguientes recomendaciones:

• La madre biológica que decida ceder a su hijo en adopción, deberá tener la absoluta convicción de que su decisión será para toda la vida, pues lo contrario no sería justo ni para el niño, ni para los padres adoptivos.
• Es aconsejable que no haya relación directa entre los padres biológicos y los adoptivos, que se ignoren los nombres, apellidos, direcciones, datos personales, etc.

LA MADRE

La madre de familia

tiene hijos, los amamanta.

Su corazón es bueno,

vigilante, diligente,

cava la tierra,

tiene ánimo.

Con sus manos

y su corazón se afana,

educa a sus hijos,

se ocupa de todos,

a todos atiende.

Hay una mujer que, mientras vive, pocas veces la sabemos apreciar; pero

después de muerta, daríamos todo lo que tenemos por mirarla de nuevo un solo

instante, por recibir de ella un solo abrazo: ella es nuestra madre.

Estuvieron con ustedes:

                                        Mary Tere y Karla.